Buenos días y feliz inicio de semana laboral, gracias por leerme en mis aportaciones personales desde Maquilando Experiencias en la industria, su servidor y amigo Ing. Pedro López Gonzalez.
Primera responsabilidad. La asignación o responsabilidad con la que inicie mi carrera dentro de la Industria Maquiladora fue la de Supervisor de Auditoria Final en la entonces Delnosa Planta 6, en el otoño de 1998. Dicha área se encargaba de realizar la prueba final a los auto estéreos que se ensamblaban para las reconocidas marcas Oldsmobile, Buick, Cadillac y Pontiac.
Formaba parte del Departamento de Calidad y mis funciones eran las de supervisar el equipo de trabajo asignado (varias auditoras y un técnico de Calidad), asegurar que se cumpliera el «rate» de producción en las estaciones de prueba e inspección para cada uno de los modelos mencionados, y por supuesto reportar diariamente los defectos o inconformidades que se detectaban. Por otra parte, esta era la primera vez que tenia personal a mi cargo.
Considero que la experiencia de supervisar a un equipo de trabajo significo un gran salto en mi carrera profesional.
Oportunidad y agradecimiento. Siempre estaré agradecido con quien era mi jefe en ese momento por brindarme la oportunidad pero sobre todo por los compañeros de trabajo que en ese entonces reportaban conmigo por su paciencia y sus sugerencias, que en gran medida compensaron mi total inexperiencia en cuanto a la supervisión de personal.
Lecciones industriales. A lo largo de los casi 5 meses que permanecí en dicha asignación aprendí la tercera lección de las muchas que me ha dado la Maquiladora: Las Fortalezas del Equipo Asignado.
Como comente anteriormente una de mis funciones era reportar diariamente los resultados de la inspección que se realizaba en el Área de Auditoria Final, lo cual obviamente implicaba generar gráficas y otros tipos de reportes usando los ya omnipresentes paquetes del Microsoft Office.
La mala noticia era que mi experiencia y habilidad en el uso de dichos paquetes en aquel tiempo era muy pobre… la buena noticia es que el Técnico de Calidad que reportaba conmigo era muy bueno manejando el Excel y el Power Point.
No paso mucho para que me diera cuenta que necesitaba re-distribuir las tareas que ambos teníamos asignadas, de tal manera que los reportes y gráficas se publicaran a tiempo sin que esto afectara el soporte al área de producción.
Esta sencilla experiencia me ayudo a comprender la importancia de que las fortalezas en un equipo de trabajo complementen los puntos o áreas débiles de su supervisor o líder.
A lo largo del tiempo que llevo trabajando en la Industria Maquiladora, he tratado de aplicar esta lección, tanto al momento de seleccionar el personal que formara parte de mi equipo como durante el proceso de desarrollo de los elementos que ya forman parte de el.
Capacidad y desempeño individual; a partir de esa experiencia, siempre he tenido bien claro que mi desempeño como supervisor esta ligado directamente con la capacidad que tenga de aprovechar las fortalezas de mi equipo para el cumplimiento de las metas de la empresa a la que pertenezco.
La mejor herramienta que conozco para determinar las fortalezas y debilidades personales (como supervisor o líder), así como las de un equipo de trabajo es el análisis SWOT (Strengths, Weaknesses, Opportunities, Threats).
Una vez que se identificaron las fortalezas y debilidades, el siguiente paso es determinar que oportunidades pueden generar dichas fortalezas y por otra, que riesgos pueden causar las debilidades que se detectaron.
Esta información puede ser utilizada para definir un plan de mejora del desempeño del equipo , y el contar con un análisis SWOT para el supervisor o líder y otro por separado para su equipo, ayudara a tener una mejor visión de que tan bien (o tan mal) se complementan ambos , considerando esta condición dentro del plan de mejora mencionado.
Ing. Pedro Gonzalez Lopez.